Desde la Europa del Sur

En la revista Astronomía de este mes de abril, y dentro de la sección #Astronomiza2.0, les hablo de Europa. Esta vez no se trata del satélite de Júpiter sino de la Europa de nuestro planeta. Deben saber que a nivel astronómico Europa no se limita únicamente a nuestro continente. Lo tendríamos complicado si queremos observar el cielo del hemisferio sur ya que las Islas Canarias son el punto más meridional de nuestro continente. Y sin embargo todavía se encuentran en los márgenes del hemisferio norte. Es por esto que Europa se vio con la necesidad de ubicar telescopios en el hemisferio sur.

Para acceder a estos telescopios nos debemos desplazar a las dependencias del Observatorio Europeo Austral (ESO) que fundado en 1962, un total de 14 países forman parte de él. Según se puede leer en su página web es “la organización intergubernamental de ciencia y tecnología de mayor importancia en astronomía”. Desde allí el observador gozará de una atalaya donde observará el cielo desde uno de los mejores lugares del mundo. Aunque el astrónomo del siglo XXI no suele viajar a los telescopios sino que los operan desde sus despachos en cualquier lugar del mundo. El romanticismo de observar a través del ocular del telescopio es algo que cada vez se hace menos en la astronomía profesional.

Imagen de la nebulosa de la Cabeza de Caballo captada por el instrumento FORS2 instalado en el telescopio KUEYEN de 8,2 m, en Paranal de ESO || Créditos: ESO (imagen original).

¿Dónde está situado el Observatorio Europeo Austral? Tendremos que desplazarnos a Chile, concretamente a las regiones de Coquimbo, Antofagasta y Atacama. Allí podremos encontrar los observatorios de La Silla, Paranal y el conjunto de radiotelescopios ALMA (Atacama Large Millimeter/submillimeter Array), respectivamente. ¿Qué podemos encontrar en cada uno de ellos?

Los observatorios de Europa en el sur

El observatorio La Silla está ubicado a más de 2.300 metros sobre el nivel del mar. En él se sitúan un total de 25 instalaciones telescópicas. Entre ellas destaca el telescopio de 3,6 metros porque ahí está dispuesto uno de los mayores cazadores de exoplanetas: HARPS (High Accuracy Radial velocity Planet Searcher).

En el observatorio Paranal, a más de 2.600 metros sobre el nivel del mar, destacan cuatro grupos de instalaciones. A saber: SPECULOOS (Search for habitable Planets EClipsing ULtra-cOOl Stars), NGTS (Next-Generation Transit Survey), los telescopios de rastreo (VST y VISTA) y el más importante de todos, el VLT (Very Large Telescope), conocido por ser el observatorio astronómico de luz visible más avanzado del mundo y está compuesto por cuatro telescopios unitarios (Antu, Kueyen, Melipal y Yepun), además de cuatro telescopios auxiliares.

Vista de la llanura de Chajnantor que muestra algunas de las antenas de ALMA bajo un cielo estrellado. En esta parte de «Europa» también se pueden ver las constelaciones australes || Créditos: ESO/B. Tafreshi (imagen original).

Y por último, en el desierto de Atacama, concretamente en la altiplanicie de Chajnantor a más de 5.000 metros sobre el nivel del mar, encontramos el conjunto ALMA (Atacama Large Millimeter/submillimeter Array), el mayor proyecto astronómico basado en tierra desarrollado hasta el momento y el instrumento infrarrojo más avanzado del mundo. Está compuesto por 66 antenas cuyas bases se pueden repartir hasta abarcar un diámetro de 16 kilómetros.

Las redes sociales

Este observatorio tiene cabida en el universo 2.0 y en esta página exclusiva de ESO podrán ver sus redes sociales. Les recomiendo seguirlo porque además de llenar sus pantallas con imágenes espectaculares, estarán al día de los últimos descubrimientos. Y aquí, Europa tiene un papel protagonista.